Patrimonio

El Real Círculo de la Amistad conserva en su sede un legado artístico de notable interés. A modo de breve introducción, en el último tercio del siglo XIX reseñamos la colección historicista expuesta en los testeros del suntuoso Liceo del pintor sevillano José María Rodríguez de los Ríos Losada (1870-1874), así como la obra localizada en su cielo a cargo del artista malagueño José Fernández Alvarado (1908). En segundo lugar y no menos importante, es la serie exhibida en la sala de los Sentidos por el ilustrador cordobés Ángel Díaz Huertas. No obstante, si repasamos la historia de esta sesquicentenaria institución, debemos mencionar la figura de nuestro pintor más universal: Julio Romero de Torres, que dejó su impronta en seis grandes lienzos que decoran la regia escalera principal, además de la titulada Rosas en la balconada al alimón con su hermano Enrique, también socio de esta entidad. De este último son dos paisajes del Guadalquivir a su paso por Córdoba (1898) que estuvieron largo tiempo -junto con la obra anteriormente citada- en la barbería del Círculo, y hoy cuelgan en la sala Alfonso XIII. Y, por último, una interesante compilación de bocetos y acuarelas de temática diversa que el polifacético artista jienense Ginés Liébana ha donado a esta Casa en estos últimos años.

Además de todo lo mencionado, el Círculo de la Amistad posee una extraordinaria antología pictórica que pone de manifiesto que esta institución se constituyó como eje, en torno al cual, giraron los artistas nacionales y extranjeros más notables de la segunda mitad del siglo XX. Un patrimonio que conforma una panorámica estética y sociocultural, y responde a la preocupación de los sucesivos directivos que respaldaron a creadores noveles, acogiendo tendencias de los más dispares. En gran medida está representado todo el proceso evolutivo de la cultura y el arte, en la que conviven las expresiones historicistas y figurativas, y otras de la más rabiosa vanguardia abstracta.

Sus galerías, primeramente, el claustro alto y el salón de Recepciones -hoy Liceo- y, posteriormente, ya a mediados del siglo XX, las salas Céspedes y Liceo, exhibieron la obra de artistas de la talla de José Saló y Junquet, Manuel León Astruc, Wynne Apperley, Enrique Romero de Torres, Victoriano Chicote, Rafael Botí, Francisco Ramos, Adolfo Lozano Sidro, Ángel López-Obrero, Fernando Quero, Luis Añez, Waldemar Ansorge y Rafael Cuenca Muñoz, por citar algunos de ellos. Ya en 1953, con la celebración del centenario del Casino Cordobés, germen del Círculo de la Amistad, fundado en mayo del siguiente año, situamos un punto de inflexión con una exposición que mostraba en Córdoba el panorama de la pintura actual. En ella se expusieron lienzos de Rafael Botí, Pedro Bueno, Miguel del Moral, Agustín Redondela, Francisco Aguilera Amate, José Duarte y un largo etcétera de destacados artistas entre los que sobresalían dos obras de Pablo Picasso y Salvador Dalí.

Por otro lado, es de justicia resaltar la excepcional labor desarrollada en esta época de esplendor cultural del Círculo a través de dos de sus presidentes que elevaron al máximo el nivel artístico de nuestra ciudad. Nos referimos a Antonio Muñoz y Ramírez de Verger (1957-64 y 1976-77) y Fernando Carbonell y de León (1965-68), ambos auxiliados por grandes expertos y amantes del arte como Antonio Povedano, Francisco Zueras, Rafael Serrano y Mariano Aguayo. Entre las exposiciones más importantes que se dieron cita en sus galerías, destacamos las de Gerardo Rueda, Manuel Rivera, Manuel Millares, Equipo 57, Venancio Blanco, Vicente Vela, Hans Hartung, Emilio Vedova, Francisco Mateos, Antonio Povedano, Joaquín Vaquero Turcios, Mohamed Sabry, Álvaro Delgado, Zao Wou Ki, Fernando Zóbel y otros muchos que dan suficiente muestra de la relevancia que tuvo el Círculo de la Amistad en el arte plástico de esta ciudad.

A finales del año 2022, el Real Círculo de la Amistad, con la financiación del IMDEEC, editó una Guía breve de la colección que nos conduce por sus diferentes salas, autores y obras, arrojando luz sobre las obras pictóricas y escultóricas más destacadas que conserva la institución.